Las Madres portaron una bandera con fotos de desaparecidos.
El recuerdo del golpe, 29 años después
Miles de personas desfilaron esta tarde por el centro porteño en repudio al 29º aniversario del golpe de Estado de 1976 en diferentes marchas que convergieron, pese a las diferencias de convocatoria, en la Plaza de Mayo con los retratos de miles de desaparecidos.
Las recordaciones del golpe, que desembocó en el período más negro de la historia argentina, se sucedieron en diferentes ciudades del interior donde además de actos, hubo escraches a ex represores
Las tres marchas fueron convocadas alternativamente por las Abuelas y Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora; por el sector de las Madres que responde a Hebe de Bonafini y que reunió además a piqueteros kirchneristas, y por partidos de izquierda y otros grupos opositores al Gobierno, que no pudieron acordar una cita única pero que tampoco se enfrentaron mas allá de las diferencias de consignas.
Los primeros en llegar a media tarde fueron los convocados por la Asociación Madres de Plaza de Mayo de Bonafini que, acompañada entre otros por el escritor Osvaldo Bayer, no participó del acto central sino que marchó alrededor de la Pirámide de Mayo para luego dirigirse al Obelisco a concretar su propio acto.
Detrás de una enorme bandera azul que reclamó el no pago de la deuda externa, se encolumnaron además organizaciones piqueteras oficilaistas como la Federación Tierra y Vivienda, que lidera Luis D'Elía, Barrios de Pie, el Frente Transversal Nacional y Popular y Venceremos.
"Mientras un solo niño se muera de hambre en el país se estarán violando los derechos humanos", afirmó Bonafini, que al llegar a la Plaza de la República distribuyó 30 mil ejemplares del libro "Memoria fértil. La dictadura, la impunidad y la compleja trama de complicidades".
El segundo de los actos reunió a las distintas organizaciones de izquierda bajo la consigna "Hoy como ayer, basta de impunidad, hambre, entrega y represión". Las agrupaciones marcharon desde el Congreso hasta Plaza de Mayo, donde desde un palco se leyó un documento consensuado por las 150 asociaciones convocantes. "La mayoría de los jueces se niega a procesar a los represores imputándoles únicamente delitos puntuales y no como partícipes del terrorismo de estado y del genocidio", denunció el documento de este sector, que también objetó a "la parcialmente renovada Corte Suprema, que sigue sin pronuciarse respecto de la indudable validez de la ley que anuló el punto final y la obediencia debida".
El grupo no ahorró críticas al propio gobierno de Néstor Kirchner porque -dijeron- "se continúa hoy en el hambre y la desocupación, en la impunidad y la represión, y no solo no atacó sus causas sino que estas se profundizan".
La titular de Abuelas, Estela Carlotto, consideró que la de hoy fue "una de las marchas más multitudinarias" y entendió que es el resultado de que a madres y abuelas les "robaron sus hijos y nietos, pero a la sociedad le robaron el futuro. Por eso salen todos a la calle a reclamar pos sus derechos".
En el mismo sentido, Nora Cortiñas, de Madres Línea Fundadora, sostubo que es "lógico que la gente salga a la calle porque el país está igual. Con los presos políticos, el hambre, la falta de salud y educación, y de trabajo se siguen violando los derechos humanos".
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