Hay un poema para tí
que no tiene palabras,
y sin embargo lo has leído
tantas veces en mis ojos,
desde siempre
desde el primer momento
dsde la primera mirada
la que cambió nuestra vida.
Así pues, amante amiga,
de nuevo quiero mirarte
entre cosas
que mañana desconoceré.
sé mi silencio, guarda mi piel,
la de tocarte
la de sentirte
la de llover sobre tí.