Aquí en pie , solo , con el mar ceniciento a los lejos y el sol oculto tras unas nubes negras como presentimientos , rodeado por un bosque de mármol , cierro los ojos y respiro hondo con la tranquilidad que me dá saber que no volverás , que no volveré a pedir perdón por torpezas que nunca lo eran , que no volveré a llorar ahogando mi dolor contra la almohada , que no volveré a tapar mis brazos ni volveré a ocultar mis ojos -ya tristes para siempre por tu causa - para que no delaten el crimen que tú y sólo tú cometías ; no volveré a planear venganzas que sólo me convertían en un ser despreciable , parecido a tí ; no volveré a tapiar mi dolor con algodones de silencio ni volveré a atragantarme con mi pena . No volveré a desear mi muerte , y tampoco la tuya ; porque hoy , tú estás muerta y enterrada en este bosque de mármol con el mar ceniciento a lo lejos y a mí sólo me queda una cosa por decir : maldita seas.
Escrito por mi tribu urbana a las 9 de Mayo 2009 a las 01:35 PM